La cosmovisión indígena: un vínculo sagrado con la naturaleza y ancestralidad, donde todo está interconectado y se valora la armonía y el respeto hacia la tierra y sus seres.
La mezcla se mantuvo en lo que se conoce como Sincretismo, en donde la cosmovisión indígena se escondía entra a las expresiones artísticas y culturales que la iglesia y corona española imponían como trabajo a los indígenas.
Un ejemplo del secretismo es el Diablo Huma, que tiene un significado espiritual importante para las comunidades indígenas, porque este personaje llega para ahuyentar a los demonios que rondan entre las cosechas. Pero esta idea nace de cuando los españoles impusieron la idea del diablo para que los indígenas temieran realizar festividades en honor a los dioses de la naturaleza como el Sol, la Luna y la Pachamama, y se trasmitió con el tiempo como Diablo Huma.
Este personaje ahora representa en esta fiesta del Inti Raymi que aún se celebra la conexión con el mundo espiritual y terrenal, algo muy característico de la cosmovisión indígena. Su atuendo se compone de un látigo que es símbolo de poder y autoridad, sus piernas se cubren de un zamarro (que es elaborado a partir de pieles de animales) y una máscara de colores y dos caras que muestran la dualidad del cosmos (bien y mal, día y noche, sol y luna, futuro y presente, el norte y el sur, algo que también se ve muy representado en la cosmovisión indígena). También tiene cabellos que representan la sabiduría y la flor del maíz. Su máscara tiene cuatro orejas que representan las cuatro direcciones y a los cuatro elementos de la naturaleza que son el agua, el aire, el fuego y la tierra.
Para la cosmovisión indígena es la forma de ver el mundo del universo que se conoce como pachakuna (mundos) y pacha (mundo). Es una forma cultural de interpretar y ver el mundo alrededor, los astros y el universo en general. El cosmos significa orden y armonía. La cosmovisión indígena tiene una forma de ver el mundo en la que se tiene la intención de vivir en armonía con la naturaleza y la madre tierra. Que exista un balance y sostenibilidad en el accionar humano, respetando y honrando a las fuerzas de la naturaleza, que mantienen todo en balance.
Existen muchas expresiones de la cosmovisión indígena, en fiestas y tradiciones artísticas y culturales, especialmente en la región andina. Sin duda, es una faceta importante del Ecuador, ya que en sus políticas públicas se consideran muchos aspectos de la cosmovisión indígena. Costumbres ancestrales que son recuperadas por las comunidades locales, son de gran importancia para el patrimonio cultural del Ecuador, la cosmovisión indígena sigue vigente y es parte importante de la cultura ecuatoriana. En un país multicultural el respeto y la apreciación por las expresiones culturales y artísticas es necesario para una mejor convivencia.
Para los pueblos indígenas, el sol y la luna son elementos fundamentales de la vida y la naturaleza.
El sol representa la energía y la fuerza vital, mientras que la luna representa la sabiduría y el conocimiento ancestral.
Para muchos pueblos indígenas, la luna es vista como una guía espiritual y una fuente de inspiración. Se cree que su ciclo, desde la luna nueva hasta la luna llena y luego a la luna menguante, representa el ciclo de la vida y la muerte, y que cada fase de la luna tiene su propio significado y propósito.
La tierra es vista como un ser vivo y sagrado, y se reconoce la importancia de mantener un equilibrio y armonía en su relación con ella. Se cree que la tierra tiene una conexión profunda con todos los seres vivos, incluyendo los humanos, y que su cuidado y respeto son esenciales para mantener el equilibrio y la armonía en el universo.
La tierra es considerada como una madre que provee todo lo que necesitan sus hijos. En muchas culturas indígenas, se cree que la tierra tiene una fuerza vital que debe ser respetada y honrada.
El agua es considerada como un elemento sagrado que tiene un papel fundamental en la vida y la salud. Se cree que el agua tiene un espíritu y una fuerza vital, y que es esencial para mantener el equilibrio y la armonía en el universo.
El agua se asocia con la purificación, la renovación y la sanación en muchas culturas indígenas. Se cree que el agua tiene el poder de limpiar y purificar tanto el cuerpo como el espíritu, y que puede ayudar a sanar enfermedades físicas y emocionales.
En la cosmovisión indígena, los puntos cardinales tienen un significado profundo y son vistos como una guía espiritual y práctica para la vida cotidiana. Cada punto cardinal tiene un simbolismo y un propósito específico que se relaciona con la naturaleza, la cosmología y la forma de vida de cada cultura indígena.
En general, los cuatro puntos cardinales (norte, sur, este y oeste) se asocian con elementos de la naturaleza y representan diferentes aspectos de la vida. El norte se asocia con la montaña, el frío y el espíritu; el sur se asocia con el agua, el calor y la emoción; el este se asocia con el sol naciente, el fuego y la inspiración; y el oeste se asocia con el sol poniente, la tierra y la introspección.
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