Fecha de realización
La Romería de la Virgen del Cisne se realiza cada 17 de agosto, cuando la madre de los Lojanos emprende un largo periplo desde su santuario hasta la catedral de la capital provincial de Loja y se queda ahí hasta el 1 de noviembre.
Lo más destacado de la Romería de La Virgen del Cisne
Nadie quiere perderse de saludar a la responsable de muchos milagros, unos la aplauden, otros la llevan en sus hombros, unos le lanzan pétalos de rosa, pero todos la aman.
- Los devotos: Se toman las vías que conducen a Loja, oran, piden por su país, por su tierra y por los suyos.

- La caminata hacia Loja: Compuesta, por feligreses de Ecuador y Perú, empieza el 17 de agosto, en ocasiones bajo una temperatura de 22 grados.
- Priostes: Los priostes de la Virgen del Cisne se encargan de armar la fiesta religiosa todos los días de la celebración.
- La procesión: Se lleva a cabo es impresionante, pues son miles de personas que caminan cumpliendo los tradicionales votos y todos pugnan por la suerte de cargar la imagen un momento durante el trayecto de 74 kilómetros que se recorren en tres días.
La imagen hace su primer alto en la hacienda "San Pedro", donde el servicio religioso ofrecido renueva la fe y repara las fuerzas del cuerpo, necesarias para continuar el viaje hasta "San Pedro La Bendita", el segundo alto. En cada parada la Virgen es cambiada de ropa.
Junto a la ruta espera Monterrey, el ingenio azucarero donde nuevas plegarias se suman a las miles de peticiones y gracias solicitadas a la Virgen. Otra misa con los que siguen la más grande romería de América, permite seguir acrecentando la devoción por lo realizado y por lo que aún les depara el camino. Al llegar a La Toma, donde la alegría se trastoca en fiesta, el júbilo depara para los asistentes unas jornadas preparadas durante un año para rendir culto a la soberana de sus corazones. Al salir de La Toma, nuevamente la Virgen es cambiada de ropa y se realiza otro servicio religioso de rigor, con el que están más cerca de la capital provincial. La imagen de la Virgen del Cisne ingresa a Loja la tarde del 20 de agosto para presidir la gran festividad religiosa, comercial y agrícola que desde 1824 se realiza el 8 de septiembre, según lo dispuso el Libertador Simón Bolívar en su visita a Loja en octubre de 1822 y que fue ratificado después mediante un Decreto Supremo de julio 1829
Una vez en Loja, la Virgen es colocada sobre el altar mayor de la Catedral, hasta el 1 de noviembre, cuando sea llevada nuevamente a su santuario en el Cisne.
Historia de la Virgen del Cisne
Cuenta la historia que, en 1594, esa zona del Cisne fue azotada por una severa sequía y plagas en los sembríos, circunstancia que provocó hambruna a los moradores del lugar, quienes desesperados decidieron abandonar los predios.
Ante ellos, se mostró entonces la imagen de la Virgen María, quien les pidió levantar allí un templo y les prometió ayudarlos para tener comida todo el año.
Y así ocurrió. Se construyó la iglesia de la Virgen, la lluvia llegó, los campos reverdecieron y acabó con el hambre.