El Arenal es una reserva desértica al pie del Volcán Chimborazo, un tesoro oculto de flora y fauna. Neviscas, vegetación de páramo y curiquingues en un paisaje semidesértico.
Aún no determinada, con respecto a lo que pertenece a la provincia.
Cuenta con una temperatura que oscila entre los 0 a 10 °C.
El área que corresponde a la zona, la vida silvestre es bastante pobre, ya que este sitio es considerado como pequeño desierto interior del valle interandino. En esta zona se localizan pequeños y aislados grupos de vegetación característica del páramo, de las cuales se observa a las plantas que forman almohadones.
Con respecto a la fauna, únicamente se pudo observar un ejemplar de curiquingue, lo que hace suponer la existencia de otras especies animales como roedores y reptiles, ya que éste se alimenta de esas especies.
• Se tiene como punto focal el volcán y sus hielos perpetuos, el estudio y observación de la vegetación especializada a este tipo de clima, los refugios de descanso y observación del paisaje circundante y acceso a la nieve y para un público especializado los ascensos a los glaciares y cúspide del volcán.
También se puede llegar a la ciudad de Riobamba siguiendo un camino por todo este desierto interior, el cual ofrece magníficas vistas del nevado y los páramos circundantes.
• Cerca del Arenal y en el camino hacia el Chimborazo, existen dos refugios para los visitantes que se interesan en actividades de andinismo, para aquellas personas que desean visitar la nieve y observar el paisaje del volcán, con servicios de guía (Guarda bosques) y facilidades mínimas para pernoctar.
• Fuera de los límites de la provincia pero a muy pocos kilómetros, se encuentra un criadero de llamas con el cual se está reintroduciendo la crianza de este extinto animal en los páramos de la región.
• A la inmensidad del pajonal se suma un nuevo elemento de contraste, la existencia de extrañas y monumentales rocas que crean una presencia fantasmagórica especialmente por las noches o rocas como las nubes que a veces se los confunde con retratos de personas o figuras de animales y se incrustan como monumentos; juega también la niebla, produciéndose esa extraña variedad del mundo de los sueños y de las irrealidades que conducen a Salinas, Simiatug y Facundo Vela internadas en lo más profundo de las estribaciones de la cordillera.
Caminata | Fotografía
Duración sugerida: < 1 hora
Rutas turísticas